por Pilmayquen Belgradi
En la India actual, aún prevalece el matrimonio infantil. En la mayoría de los casos, es un arreglo entre los padres de la niña de sexo femenino con quien va a contraer matrimonio, por ende, es de carácter “forzado”. Estos casos se dan con mayor frecuencia en regiones económicamente desfavorecidas tales como Rajasthan o Bihar, ubicados respectivamente en el Noroeste y Este de dicho país.
Según datos aportados por UNICEF, es una práctica que se produce, principalmente, en zonas como Asia meridional –incluyendo a Afganistán, Pakistán e India-, que sufren de gran vulnerabilidad económica. El matrimonio por arreglo, entonces, representa un salvataje para familias de escasos recursos ya que el mismo puede estrechar vínculos familiares y económicos de conveniencia. En la mayoría de los casos, como los padres de la niña no pueden sostenerla económicamente creen que la mejor solución es un “tutor varón”. También, muchas veces, este tipo de arreglo se lleva a cabo para saldar una deuda.
Estos mecanismos traen consecuencias tanto económicas como de salubridad, ya que la mayoría de las niñas quedan embarazadas antes de los 18 años de edad corriendo peligro su vida y la del bebé. Por otro lado, estos tipos de arreglos siguen perpetuando la cadena de pobreza en donde estas familias se ven inmersas. En otras palabras, el niño, apenas tenga edad suficiente, deberá aportar a la economía familiar con su propio trabajo.
Como es sabido, la prohibición del matrimonio infantil en India comenzó en 1860, cuando se encontraba bajo “tutela británica”. En ese entonces, la legislación inglesa declaró nulos todos los casamientos concretados con niños menores a 10 años. En la actualidad, la legislación india no reconoce matrimonios concertados con menores de 16 años. No obstante, India es el lugar donde se concretan el 40% de matrimonios infantiles en el mundo.
Muchas veces, combatir este tipo de costumbres, es posicionarse en contra de estructuras culturales arraigadas desde antaño en ciertas sociedades. Dichas estructuras, que son sustentadas por principios religiosos, tienen un trasfondo particular: la vulnerabilidad socioeconómica de miles de familias indias. En nuestra opinión, la marginalidad y pobreza continúan legitimando este tipo de “prácticas” en sociedades como la de India.
Fuente:
http://www.elmundo.es/elmundo/2010/03/24/solidaridad/1269433492.html
http://www.unicef.org/spanish/protection/index_earlymarriage.html